
Miles de personas participaron este sábado en una protesta en Buenos Aires contra el feminicidio, en respuesta al triple crimen que conmocionó al país. Las víctimas fueron identificadas como Lara Gutiérrez, de 15 años; Morena Verdi y Brenda del Castillo, ambas de 20 años. Los asesinatos fueron descritos como brutales y fueron difundidos en vivo a través de redes sociales, lo que volvió a encender el debate público sobre la violencia contra las mujeres. La Policía afirma que una banda de narcotraficantes sería responsable y que el crimen se transmitió como una advertencia. Hasta el viernes, cinco sospechosos —tres hombres y dos mujeres— habían sido detenidos, según la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, mientras un joven peruano de 20 años, señalado como líder del grupo, permanece prófugo.
BBC News Mundo señala que las tres habían sido reportadas como desaparecidas. Sus cuerpos fueron encontrados enterrados en una propiedad en un suburbio del sur de Buenos Aires, cinco días después de su desaparición. Investigadores indicaron que las víctimas fueron engañadas para subir a una camioneta creyendo que se dirigían a una fiesta; según las autoridades, esa maniobra formaba parte de un plan para castigar a estas jóvenes por violar el código de la pandilla y para servir como advertencia para otros. Las autoridades también publicaron una fotografía del presunto autor intelectual, un ciudadano peruano, a la espera de que alguien lo reconozca.
Uno de los detenidos reveló un video del incidente durante el interrogatorio, según el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Javier Alonso. En las imágenes se escucha a un líder de la pandilla decir: «Esto les pasa a los que me roban droga». Las autoridades difundieron la evidencia y avanzan con la investigación para localizar al supuesto cabecilla; además se difundió una foto del líder para facilitar su identificación por parte de la población. Los reportes de Getty Images y BBC reforzaron la cobertura de la investigación y de la protesta posterior.
Familiares y amigos de las víctimas se manifestaron frente al Congreso, convocados por grupos de derechos humanos y organizaciones políticas, para exigir justicia y medidas de protección para las mujeres. El padre de Brenda, Leonel del Castillo, declaró que las mujeres deben ser protegidas más que nunca y que le resultaba imposible identificar el cuerpo de su hija por los abusos que sufrió. Antonio del Castillo, abuelo de las primas, calificó a los asesinos de sanguinarios y pidió que se haga justicia. En la marcha se coreó el lema «No hay víctimas buenas ni malas, solo feminicidios».
En Argentina, este caso se inscribe en un contexto de alta violencia de género: un monitor de feminicidios citado por AFP indica que una mujer es asesinada por un hombre cada 36 horas. La cobertura de BBC News Mundo y la difusión de imágenes de Getty Images acompañaron la difusión de la historia, al tiempo que se invitaba a seguir informándose a través de las plataformas de la cadena. Autoridades y organizaciones de derechos humanos reiteraron la necesidad de respuestas institucionales y de una respuesta social firme para prevenir futuros crímenes y proteger a las víctimas potenciales.