Condenan a la oligarca Alena Zsuzsova por el asesinato del periodista eslovaco Kuciak

El panel de tres jueces del tribunal de Pezinok que ha repetido el juicio por el asesinato del periodista Jan Kuciak y su novia Martina Kusnirova, cuatro años después del doble crimen, ha considerado culpable a la pareja del poderoso empresario Marian Kočner, Alena Zsuzsova, mientras que a él le ha vuelto a declarar inocente por falta de pruebas.

Zsuzsova ha sido declarada culpable de participar tanto en el complot para que el periodista fuese asesinado como en los planes para asesinar también a los fiscales Maros Žilinka y Petr Sufliaske. Kočner, sin embargo, vuelve a eludir la culpabilidad, aunque ya está en la cárcel cumpliendo una condena de 19 años por varios crímenes que aparecieron durante la investigación sobre la muerte del periodista. A Zsuzsova, también en prisión, le caen otros 25 años adicionales.

Kuciak y su pareja fueron asesinados en su vivienda de Velka Maca el 21 de febrero de 2018, cuando el periodista trabajaba en varios casos de corrupción. Un artículo publicado a título póstumo, con las averiguaciones que había hecho, desencadenó protestas masivas en Eslovaquia y la dimisión del primer ministro Fico, sumiendo al país en una crisis política que continúa a día de hoy. Eslovaquia está ahora gobernada por un gabinete de tecnócratas a la espera de las elecciones que se celebrarán en otoño y que podrían devolver el poder a Fico.

Sí fueron condenados el autor material de los disparos, el antiguo militar Miroslav Marcek, y dos cómplices. Kočner y Zsuszsova fueron sospechosos desde el principio, pero en septiembre de 2020 lograron una primera absolución por falta de pruebas. Menos de un año después, en junio de 2021, el Tribunal Supremo de Eslovaquia aceptó el recurso de apelación presentado por la Fiscalía y revocó el perdón, obligando a un segundo juicio. Ambos habían sido mientras tanto condenados por otros delitos.

La jueza Ružena Sabová ha informado ahora que la sentencia ha sido dictada por unanimidad y considera demostrado que Zsuzsová ordenó el crimen e incluso consiguió las armas. Durante la lectura de la sentencia, que detalla el tiroteo en el que la pareja fue alcanzada por docenas de balas, la madre de Martina Kušnírová lloraba desconsolada en la sala, sentada entre los 11 representantes de las víctimas. La jueza considera probado que Alena Zsuzsová acordó con el intermediario Andruskó el asesinato de Ján Kuciak a cambio de una recompensa monetaria. Se sirvió del mismo método para ordenar también el asesinato de Maroš Žilinka.

Miedo a perder ingresos

Sabová ha declarado que el motivo de Zsuzsova para ordenar el asesinato de Kuciak fue su temor de perder los ingresos de Kočner, que era su único apoyo financiero y que se veía amenazado por las revelaciones que estaba a punto de publicar el periodista. También ha hecho varios comentarios sobre la comunicación que mantenían ambos a través de la aplicación Threema. «Es cuestionable por qué Kočner y Zsuzsová se comunicaban abiertamente sobre la comisión de asesinatos confiando en el secreto de la comunicación». Ha recordado que Zsuzsová inició los supuestos cifrados y ha prestado especial atención a las pruebas de que fue ella quien ordenó primero el asesinato de Žilinka y después el de Kuciak, mientras que no está probado que consultara estas órdenes con Kočner.

La sentencia ha sido dictada por unanimidad y considera demostrado que Zsuzsová ordenó el crimen e incluso consiguió las armas

Sobre la afirmación de Andruskó (uno de los testigos) de que Kočner ordenó el asesinato a través de Zsuzsová, la presidenta del tribunal ha explicado que, si Kočner hubiera sabido del asesinato del periodista, habría retirado el equipo de vigilancia que se ocupaba de él día y noche. También ha señalado que no ha sido probado cuándo y cómo habría llegado el dinero de Kočner a Zsuzsová para pagar a los asesinos. Contra Kočner, en su opinión, sólo han sido presentadas pruebas indirectas.

Esta segunda edición del juicio, como lo fue la primera, es el espejo de una época en la que la corrupción gobernaba Eslovaquia, en manos de pequeños grupos de empresarios que manipulaban a los legisladores y a los tribunales. La nueva sentencia sobre Zsuzsová sugiere que esa época es ya parte del pasado, pero, según hacían notar varias pancartas a la puerta del tribunal, mientras Kočner siga siendo exculpado quedará la sospecha de que todavía tiene influencia suficiente, incluso desde la cárcel, para orientar las sentencias.

Published at Fri, 19 May 2023 17:24:58 +0000